Amazonas
La Región Amazónica de Colombia o simplemente Amazonía, comprende el 42% del territorio nacional y es la zona menos poblada del país. A la vez, hace parte de la gran región suramericana de la Selva amazónica, la más extensa zona forestal del mundo que es compartida por Venezuela, Brasil, Colombia, Ecuador, Perú, Guyana, Suriname, y Bolivia. En consecuencia, la Región Amazónica de Colombia es la más forestal con una superficie de 483.119 km cuadrados (Sinchi, 2008).
La Amazonía es quizá una de las regiones colombianas en donde más se han conservado los pueblos indoamericanos. Tal hecho es una gran riqueza cultural que pone al país en contacto con las manifestaciones y la etnografía precolombina.
En la Amazonía se desarrolla la ganadería en el piedemonte, las actividades agrícolas de subsistencia y la explotación forestal. La pesca fluvial es artesanal y no alcanza a ser industrializada u organizada, ni a tener los volúmenes que se alcanzan en las costas del país. Los yacimientos petroleros se encuentran alrededor del río Putumayo. La mayoría de las actividades económicas que se desarrollan en la amazonia, no están en armonía con el paisaje ni con sus pobladores nativos. Entre estas actividades están: la pesca, la minería, la ganadería y la extracción forestal.
El nombre del departamento procede del nombre del gran río Amazonas. El río a su vez fue así denominado por el conquistador español Francisco de Orellana (1511 - 1546), el cual, en su viaje de exploración, dijo que fue atacado por "feroces mujeres" que se le semejaron a las amazonas de la mitología griega; sin embargo, la existencia de una tribu guerrera femenina en tal tiempo no ha podido ser demostrada y es posible que fuesen guerreros amerindios de pelo largo los que impresionaron al conquistador por el cual denominó a las selvas y al río con el nombre de Amazonas.

El Departamento, dada su gran riqueza ecológica y medio ambiental, es sede de varios parques naturales nacionales colombianos:
• Parque Nacional Natural Amacayacu.
• Parque Nacional Natural Cahuinarí.
• Parque Nacional Natural Río Puré.
Existen también centros etnográficos de gran importancia en los siguientes lugares:
• Atacuarí.
• Puerto Nariño.
• Nazareth.
• Arara.
• Santa Sofía.
• Edwar Cardona
La expedición al Amazonas colombiano representa una de las aventuras ecoturísticas más fascinantes entre la flora y la fauna en su estado más silvestre. Es así mismo una experiencia cultural inmejorable por la posibilidad de asistir a los territorios donde se asienta una veintena de grupos étnicos primitivos, al igual que el invaluable tesoro natural que custodian, de los cuales se destacan los huitotos, los yaguas y los ticunas.

Aunque el departamento está bañado por innumerables ríos como el Putumayo y el Caquetá, es gracias a la navegabilidad del Amazonas que se conocen muchos de los encantos de la región, aquellos lugares de imprescindible visita entre la espesa y fecunda selva, donde permanentemente se vive una fiesta salvaje que funde los sonidos de la abundante flora y de la alegre fauna.
Parque Nacional Natural Amacayacu
Después de dos horas a lo largo del río se llega al Parque Nacional Natural Amacayacu, majestuosa reserva de 294 mil hectáreas en la que conviven 150 especies de mamíferos, 468 de aves y otra cantidad no determinada de reptiles. Así mismo, sobre las aguas tranquilas en inmediaciones del parque, se aprecia la victoria regia, planta acuática cuyas hojas redondas alcanzan diámetros hasta de dos metros.
En el Parque Nacional Natural Amacayacu, majestuosa reserva de 294 mil hectáreas, conviven 150 especies de mamíferos, 468 de aves y una gran cantidad de reptiles.
Gracias a que el parque cuenta con infraestructura de alojamiento, es posible reconocer el lugar y los atrayentes cercanos durantes dos o más días. Paseos por la selva en el sendero Nainekumaw, canotaje nocturno por la quebrada Matamata, escalada de árboles y caminatas entre los doseles, visita a tribus aborígenes o un viaje en la casa flotante son algunas de las muchas cosas para hacer en esta área protegida.

Puerto Nariño
Vía fluvial y a unos veinte minutos del Parque Amacayacu se llega a Puerto Nariño, que junto con Leticia son los dos únicos municipios del departamento del Amazonas. Dicha población se destaca por la organización, la limpieza y la ausencia de contaminación, entre otras cosas, porque a pesar de tener calles pavimentadas allí no existen los automóviles. Es necesario buscar en Puerto Nariño el mirador que facilita una vista de 360º sobre la selva amazónica.
Lago de Tarapoto
Por la misma vía del pueblo y navegando el río Loretoyacu, afluente del Amazonas, aparecen los lagos de Tarapoto, que deslumbran por su limpieza, calma y porque en sus aguas habitan los espectaculares delfines rosados, una especie cuyo origen los nativos se la atribuyen a una leyenda, según la cual los dioses tribales sintieron tanta envidia por la belleza impresionante de un indio que decidieron convertirlo en delfín. Con paciencia y la calma que brinda el paradisíaco escenario, es muy posible apreciar la mágica danza en el agua de esta escasa, rara y bella especie.
